sábado, 6 de abril de 2013

En la calle Avinyó

Comienzo a notar cada vez más un notable desencanto hacia la falta de originalidad en las propuestas de moda y lo repetitivo que se hace el tema tendencias, que más que tendencias son una continuidad de lo mismo pero con un mal llamado "toque nuevo".

Y el mundo egoblogger no ha hecho más que intensificar esa sensación de tomadura de pelo, porque ¿quien puede sentirse especial llevando algo que ya ha visto por internet 2 meses antes en 289.987 blogs de moda?

Opiniones personales a parte, una opción cada vez más implantada entre todos los fashionistas en la búsqueda de lo especial que te lleve a adquirir ese estilo propio es el vintage. ¿Y que tiene de especial una pieza vintage?

Leí una definición de lo más certera sobre este concepto en una entrevista de María León a Sylvie Sans directora de Kiki-Ritz (www.kikiritz.com) de Biarritz:

"Llevar una pieza vintage es sentir que tienes una pieza única y que a la vez cuenta una historia. Estampados que ya no se encuentran. La exclusividad. Colores variados y formas que nos desvelan recuerdos."

Tengo la gran suerte de vivir en un  lugar en el cual no es difícil encontrar esas piezas únicas y exclusivas. Desde siempre me ha gustado perderme entre tiendas y mercadillos antiguos a la caza de piezas de otra época con esa calidad y diseño único.

Y una de esas opciones al low cost es la calle Avinyó de Barcelona.










Es uno de mis lugares preferidos y me encanta recorrerla, mirar sus antiguos edificios señoriales que con el paso de los siglos se transformaron en otras casas llamadas de "tolerancia" no en vano Picasso pintó en esta calle su famoso cuadro "Les demoiselles d'Avignon".

En la calle Avinyó puedes disfrutar de un entorno muy ecléctico en donde se respira un ambiente entre cool y bohemio muy especial. Aquí encontrarás desde un claustro gótico en el interior de un restaurante hasta tiendas de lo más variado: ropa vintage, discos, antigüedades... Hay que abrir bien los ojos para disfrutar de todo lo que esta calle te regala.








Entre mis preferidas tenemos La Manual Alpargatera (Avinyó 7) tienda única en su género, que empezó como taller de alpargatas o espardeñas a principios del siglo XX y que ha sabido combinar la tradición artesana milenaria con las actuales tendencias en moda sin olvidar la calidad. ¡Cuantos dolores de pies me he ahorrado en esos calurosos viajes estivales interminables!



Y como no, encontramos tiendas de ropa con ese toque especial y único que todos buscamos. Doss (Avinyó 22) combina modernidad con ese sabor a lo antiguo y  de calidad. Ideales sus vestidos muy femeninos e interesantes. Uno con estampado de margaritas se vino conmigo a casa.



Para acabar una visita a El Gran Café (Avinyó 9) fundado en 1920 todavía con la decoración modernista original y en donde puedes saborear cocina tradicional catalana con música de fondo de piano.





Recomiendo una visita a una de las calles más cosmopolitas de Barcelona. ¡Espero que os guste tanto como a mi!



6 comentarios:

  1. Caray esto no es un post sino todo un reportaje, creo que cabe todo, el low cost, el vintage porque en la variedad está el gusto, somo cada uno de un padre y una madre y tiene que haber variedad. me ha encantado el paseo que nos has dado por Barcelona. Gracias

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  2. Qué pinta tiene la calle ...!!! Muchas gracias por la información. Y el caso es que creo que he paseado por ella ...

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  3. estupendo post, qué calle más bonita, si voy por allí no dudaré en recorrerla!

    besitos

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  4. hace tanto tiempo que ni piso bcn, esta info viene muy bien!
    www.cenicientanollevazapatos.blogspot.com
    www.youtube.com7user/AuroraVegaestilista

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  5. Tengo ganas de volver a Barcelona!!!

    http://estiloypunto.blogspot.com

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  6. un blog genial, me encantó!! si quieres podemos seguirnos por las redes sociales... un beso!!!

    http://talkingaboutfashion-beatrizfernandez.blogspot.com.es/

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